Fuga de aceite de transmisión
La suciedad en las piezas de la transmisión es más común en vehículos con alto kilometraje cuando se operan intensivamente a altas temperaturas. También se puede observar aceite en la unión de la transmisión manual con el motor y en el embrague. Un mal funcionamiento del sistema de ventilación de la transmisión también puede ser la causa de una fuga de aceite. Por eso es recomendable revisar primero el respiradero y, si es necesario, limpiarlo.
Sin embargo, la causa más común de una fuga de aceite es la pérdida de elasticidad de los retenes o revestimientos debido al envejecimiento y al funcionamiento a altas temperaturas. Los retenes se arrugan y se adhieren a las piezas de forma suelta.
En este caso, la impermeabilidad del mecanismo puede restaurarse mediante la adición de aditivos al aceite. El componente activo de este aditivo es un plastificante específico. Debido a la acción del plastificante, el material de los sellos de aceite se hincha y se adhiere a las superficies con mayor firmeza.